Terneros de engorde - 29 marzo 2025

¿Está preparado para refrescar a sus vacas? Como es sabido, el estrés por calor afecta significativamente a las vacas lecheras durante el periodo de lactación. Cuando el índice de temperatura y humedad (THI) supera los 68, las vacas comienzan a experimentar malestar y estrés, lo que provoca una reducción en la producción de leche. Sin embargo, no son únicamente las vacas en lactación las que se ven afectadas, puesto que otros animales del rebaño también pueden sufrir estrés por calor.

Los terneros son más susceptibles a las enfermedades

Estudios recientes demuestran que el estrés por calor también afecta a los terneros que se encuentran en el útero de las vacas preñadas. Los terneros nacidos de vacas sometidas a estrés por calor suelen ser más pequeños al nacer y tienen un peso más reducido al destete. Estos terneros absorben menos inmunoglobulinas (IgG) del calostro, lo que los hace más susceptibles a enfermedades e infecciones. 

Menor producción de leche en la siguiente generación

Al comparar las crías de vacas sometidas a estrés térmico con las de vacas que han sido ‘enfriadas’ durante las últimas seis semanas de gestación, los estudios reflejaron diferencias significativas. Los terneros de madres sometidas a estrés térmico produjeron menos leche durante su primera, segunda y tercera lactancia. Esta reducción en la producción de leche no solo afecta a la generación inmediata, sino que tiene implicaciones a largo plazo para el rebaño. Lo más sorprendente es que las nietas de vacas sometidas a estrés térmico también produjeron menos leche que las de vacas de madres sometidas a enfriamiento. Esto indica que los efectos del estrés térmico pueden trascender generaciones y afectar la productividad y la rentabilidad generales del rebaño.

Implemente estrategias de ‘enfriamiento’

Para mitigar estos efectos adversos, es fundamental implementar estrategias de ‘enfriamiento’ para sus vacas durante los meses de verano. Los sistemas como ventiladores, aspersores y áreas sombreadas, pueden ayudar a reducir la temperatura y aliviar el estrés de las vacas preñadas. También es esencial garantizar que las vacas tengan acceso a abundante agua limpia y fresca. Al tomar estas medidas, puede proteger el potencial de producción de leche futura de su rebaño, asegurando vacas más sanas y mayores rendimientos en los años venideros. 

No espere a que el calor se vuelva insoportable: comience a prepararse con antelación para mantener a sus vacas frescas y cómodas durante todo el verano. La salud y la productividad de sus vacas dependen de ello, al igual que la rentabilidad de su explotación lechera.

Referencias

Laporta, J., et al. «Late-gestation heat stress impairs daughter and granddaughter lifetime performance.» Journal of dairy science 103.8 (2020): 7555-7568. 

Dado-Senn, Bethany, et al. «Early-life heat stress exposure impacts dairy calf feeding and thermoregulatory behavior.» JDS communications 3.1 (2022): 38-43. 

Dado-Senn, B., et al. «Methods for assessing heat stress in preweaned dairy calves exposed to chronic heat stress or continuous cooling.» Journal of dairy science 103.9 (2020): 8587-8600. 

Ouellet, V., J. Laporta, and G. E. Dahl. «Late gestation heat stress in dairy cows: Effects on dam and daughter.» Theriogenology 150 (2020): 471-479.